miércoles, 2 de octubre de 2013

Salchicha fabricada a modo de coche

¿Dónde quedó la humanización a la hora de crear estas elaboraciones cárnicas? Empecé a investigar sobre este tema cuando una persona de profesión charcutero me dijo que el dejó de consumir estos productos cuando supo realmente cómo lo fabrica la industria. Razón de ello es que el 99% de las salchichas que consumimos proceden de cocinas industriales.

La elaboración de las salchichas se creó para aprovechar las partes menos nobles que posee un cerdo como son los recortes, despojos y grasas.  Todo ello se pica y se condimenta con sal y especias, la mezcla se introduce en la tripa del animal y se deja madurar en un lugar acondicionado para ello. Así es como se elabora este producto de una forma artesanal y tradicional.
Esta es la cara bonita del cuento ya que lo que se hace es aprovechar partes del cerdo que no son nobles  para su consumo. Ahora te voy a contar cómo lo hace nuestra querida industria alimentaria.
Una vez que el cerdito se hace mayor, está bien cebado y su crecimiento ha sido más rápido del que debería, se sacrifica de alguna forma. Una vez muerto el cerdo, la industria deja de ver un animal y ve un producto de 70 kilogramos con sabor a cerdo listo para su triturado.
Hay muchas empresas que en vez de comprar  productos cárnicos enteros (animales muertos de 70kg con sabor a cerdo) compran los recortes que les sobra a otras empresas del sector, pero las que el 80% de sus ventas se basan en salchichas y derivados los compran enteros o incluso poseen su propia granja.

La forma de crear una salchicha industrial es muy parecida a la creación de un automóvil: trabajo en cadena, turnos de 8h, equipamiento de protección personal, equipos de desinfección, fases del producto, etc.

Te voy a contar cómo se produce esta delicia industrial muy conocida por su participación en los perritos calientes.
Una vez recibida la mercancía de productos cárnicos enteros, con ayuda de palas parecidas a las de las excavadoras en la construcción, los vierten sobre unos rodillos de acero para su trituración. Para que te hagas una idea es igual de espeluznante que meter el dedo en una picadora. Pude ver en un video demostrativo de su elaboración como arrojaban a estos rodillos los animales enteros con cabeza y vísceras incluidas.
Una vez concluido el proceso de molido se amasa la carne con “mil” productos de los cuales cinco son naturales como el agua, la sal y tres condimentos  naturales, el resto son saborizantes refinados, jarabes y conservantes.
Tras el amasado se extrae el aire a la mezcla y se inserta en paquetes de colágeno, celulosa o plástico para dar la famosa forma de cilindro.
A partir de aquí el proceso  es normal, se cocina y se envasa  si este va a ser un producto de quinta gama o simplemente se distribuyen crudas, mal llamadas frescas, para su uso en parrillas y grills.


Investigando sobre este artículo  pude ver las adversidades que padecen los animales manipulados por la industria, dejan de estar vivos y se convierten en productos para su manipulado y venta. Hay industrias que tienen factor humano y el paso de animal vivo a producto lo hacen con sumo cuidado, pero otras que con ajustarse a la ley o ni eso para abaratar costes hacen auténticas atrocidades.

sábado, 28 de septiembre de 2013

La leche

¿Consumirías leche de rata alguna vez?  ¿De cerda, yegua o perra? entonces, ¿por qué la de vaca sí?
Pensamos que consumir leche de vaca todos los días puede ser muy beneficioso para la salud pero ¿qué hay de cierto en esto?
Los seres humanos somos los únicos que consumimos leche de otros animales en nuestra etapa de lactancia y también después de esta. Los terneros consumen leche hasta los dos años  y cualquier animal después del periodo de lactancia la deja de consumir, entonces ¿por qué nosotros seguimos consumiéndola? ¿Porque pensamos que nos aporta una gran cantidad de nutrientes? Muchos expertos afirman que la leche no nos aporta el calcio que nosotros pensamos.

Al tomarla nos introducimos una sustancia llamada caseína que se utiliza en la fabricación de productos no alimentarios como pinturas, pegamentos industriales, plásticos, etc. Esto hace que al ingerirla, este se adhiera en el intestino impidiendo la absorción de otros ingredientes.

El consumo de leche de vaca puede provocar alergias muy perjudiciales en la etapa infantil causando graves enfermedades o incluso la muerte. Estas alergias por lo general suelen afectar al sistema digestivo provocando vómitos pero también daña la piel e incluso al sistema respiratorio.

La leche de vaca contiene un 70% de ácidos grasos saturados y gracias a la pasteurización y otros procesos, estos ácidos atraviesan las paredes intestinales convirtiéndose en partículas no digeridas aumentando los niveles de colesterol malo y grasas saturadas en la sangre.
Investigadores de la materia afirman que el organismo no está preparado para alimentarse con leche de vaca o de otros animales y por ello se relaciona con distintos tipos de cáncer culpándola de la aparición del cáncer de mama. Mujeres que consumen más de 200ml al día de este producto tienen tres veces más de probabilidades de contraer cáncer de ovarios de las que no lo ingieren. Un grupo de investigadores holandeses  en 1989 concluyeron que personas que consuman más de 600ml de leche al día tienen más riesgos de desarrollar cáncer de pulmón.

En la época de lactancia los bebes que consumen leche de animal en vez de la de su madre tienen más probabilidades de desarrollar diabetes  de los que no y para seguir metiendo leña al fuego también se culpabiliza a la leche animal con el aumento de infección de garganta y oídos.

Más investigaciones demostraron que la leche de vaca desmineraliza a las personas. Haciendo un estudio a mujeres que no consumían leche no padecían de osteoporosis pero las que sí lo hacían sus niveles de calcio eran mucho más bajos y con ello aumentaban el riesgo a desarrollar esta enfermedad.

Pero no todo es malo, la leche contiene agua muy necesaria para nuestra vida, y mezclado con azúcar, grasas trans y un poco de cacao, acompañado de la maravillosa repostería industrial obtienes un potente desayuno para ti o tus hijos.

lunes, 23 de septiembre de 2013

Hoy toca venderme

Como ya me conoceréis o no, me llamo Adrián Romanillos y hoy os voy a hablar de mí, la razón de que lo haga es porque aún nadie más lo ha hecho y qué mejor manera de darme a conocer que escribiendo estas líneas.

Con 18 años me matriculé en la escuela de hostelería de mi ciudad, Guadalajara. La pasión de la cocina me hacía ir a clase con regularidad, cosa que no era de costumbre en mis años anteriores. Sabía que quería ser cocinero, y no uno más, si no el cocinero. Pero mi pasión no nació con 18 años si no de muy chico, no recuerdo la edad, cuando me regalaron ese fantástico juguete que a toda niña le pirraba, si, a toda niña he dicho, se trataba de la mini cocina, donde ya me creía cocinero, dando mis platos imaginarios a mi familia. Creo que a todo el mundo le ha marcado en su vida algún tipo de regalo infantil, si no que se lo digan a Fernando Alonso.

La fuerza que desaté en mis primeros años de aprendizaje me valieron de mucho, cuando la gente paseaba yo corría, la razón de esto es que el que más corre aguantando el tipo más lejos llega. La competencia fue y sigue siendo mi mejor aliado, cuando alguien lograba una meta yo tenía que estar a la par o tenía que pasar por ella, pero siempre haciéndome notar.
Desde el principio me quise rodear de los mejores absorbiendo sus enseñanzas como si de una esponja se tratase, mucho de esto se lo debo a mi buen amigo Fernando, profesor de esta escuela y gracias a Dios aún sigo rodeándome de esa gente.
En los años de escuela ya empecé a trabajar, tenía la necesidad de formarme rápido, fue un objetivo que me puse y lo cumplí. Mi primera cocina profesional la pisé en Sigüenza de la mano de mi buen amigo Quique de El Doncel. Al ser este mi primer restaurante lo llevo muy presente.
En estos años me involucraba y cualquier actividad que se hiciese fuera de la escuela como concursos provinciales y nacionales, siempre era el primero en ofrecerme, tanto es así que incluso me ofrecí a hacer un programa de cocina para niños.

Una vez finalizado el proceso de aprendizaje en la escuela, decidí seguir aprendiendo  en los mejores restaurantes de España , y eso hice, en dos años recorrí varios restaurantes con y sin estrella, como Zalacain, Pedro Larumbe, el Bohio, haciendo algunos extras en La Terraza del Casino, y terminando mi recorrido en Mugaritz situado en su día el tercer mejor restaurante del mundo según aquella lista de la que te hablé en mis primeras entradas.

Dejando atrás España con 22 años cogí el avión rumbo a Italia, en un hotel con estrella Michelin situado al noreste del país. Esté lugar me marcó, lo primero por su cocina, ya que la cocina italiana la conoces de refilón pero no en su esplendor y lo segundo por los profesionales que había y en especial a Terry, que todo lo que sé de la cocina de esa tierra se lo debo a él.

Terminando esta temporada y de vuelta a casa tardé poco en relajarme, ya que en poco más de dos semanas estaba haciendo las maletas para marcharme a Londres, la ciudad en la que vivo actualmente. Comencé en esta ciudad de locos en un restaurantes español llamado Iberica restaurant, y sé que triunfar en esta ciudad es llevar la medalla de oro a todo el planeta, por eso mi involucración personal en esta empresa ha sido plena, muestra de ello es que a los nueve meses de empezar me ascendieron a segundo de cocina y responsable de los eventos externos que ofrece la empresa tales como comidas privadas en importantes sitios de la ciudad, casas privadas, ferias gastronómicas o simplemente eventos dedicados a la promoción del restaurante. Ahora tengo 24 años, tengo un par de ofertas para iniciar proyectos en restauración dentro y fuera de la península, estoy abierto a escuchar cualquier proyecto que no impida seguir con mi trabajo actual y se me llena la boca al decir que soy segundo de cocina en un restaurante con categoría en Londres.

A mis espaldas casi no hay muchos años de madurez profesional pero los poco que ha habido los he sabido aprovechar, el camino sigue y yo con él.

No dejes de seguir las huellas de los demás, y te darás cuenta que cada vez van quedando menos en el camino.

sábado, 21 de septiembre de 2013

Cómo sacar el artista que llevas dentro

¿Cuántas veces has intentado reproducir una receta y el resultado no es el que esperabas en aquel menú tan importante que hiciste? o ¿has visto una receta en algún lado y no te has atrevido a hacerlo por su complejidad?
Te voy a enseñar las claves para que seas capaz de poder hacer arte y dejar deslumbrados a tus queridos comensales con tus creaciones o reproducciones y los pasos que debes seguir para hacer un menú en algún momento especial. Saca el chef que llevas dentro.

La primera clave es tener claro qué quieres cocinar e ir apuntando en una hoja el menú que vas a ofrecer. En algún momento de este proceso automáticamente te vas a dar cuenta que tus ideas están yendo por el buen camino o se están desviando de la trayectoria lógica que tiene un menú.
 Es muy importante que esquematices tu menú, ya puede ser por ejemplo:
  • En un primero, un segundo y un postre.
  • En aperitivos, un plato principal y un postre.
  • O solo aperitivos.
A esto me refiero, tener claro la secuencia del menú.
Una vez resuelto te toca elegir los platos, estos tendrán que ser acordes entre sí, si quieres hacer melodía tendrás que mantener un ritmo y elegir las notas adecuadas para emocionar al público, y claro está, saber a qué público estas brindando tu creación.
Si quieres impresionar es muy recomendable empezar tu función con algo que deslumbre. Como opinión propia elegir un estilo minimalista, bocados pequeños, limpios, estéticos y que llenen de emoción el paladar de tus comensales. Con ello conseguirás puntos a tu favor y crearás unas buenas expectativas de las siguientes secuencias del menú.
También decirte que igual de importante es empezar con algo deslumbrante que el final de este tiene que ser como un final de fiestas, con fuegos artificiales, así que saca al pastelero que llevas dentro y recrea algo rico y sabroso.
Una vez tengas esto resuelto y tu subconsciente te dé el visto bueno para arrancar habrás terminado la parte más importante, ya solo te queda seguir al pie de la letra tu canción.

Crea tu lista de ingredientes y ve a comprar, se curioso y pierde un poco de tiempo en mirar productos que desconozcas, en futuros menús te acordarás de ellos y quizás te atrevas a introducirlos a tus platos.
Una vez hallas recopilado todo el género es hora de cocinar, limpia la cocina a fondo y organízate, ten claro tus movimientos y muy importante, ten despejada la mente. Sigue estos pasos y solo fallaras por la inexperiencia que tengas.
A la hora de arrancar a cocinar deberás tener el espacio de trabajo despejado y con los utensilios en buen estado, si no es así preocúpate en que lo sea, si no estarás caminando por el camino de la despreocupación y cualquier detalle se notará en tus platos.
Controla la temperatura de tus elaboración, si no sabes muy bien cómo se hace algo, infórmate hasta que lo tengas claro, internet es la solución rápida, pero preguntando a la gente es la solución óptima ya que le vas a poder preguntar más profundamente. Para un asado controlar la temperatura es la clave del éxito ya que necesitas conocer a que temperatura debe estar el interior del producto para bordar la técnica.
Preocúpate por la destreza del corte con tu cuchillo, este debe estar perfectamente afilado (en una entrada anterior muestro el filo de mi cuchillo). Podrás jugar con cortes estéticos y limpios.
Hay algunos platos que necesitan ser manipulados con exactitud y controlar la técnica. Si quieres aprender como cocinero no descartes estas recetas por su complejidad, crece y aprende de los errores.

Borda la salsa. Es un detalle que cualquier persona sabe apreciar, esta debe ser limpia, sabrosa, untuosa. La cocción debe ser lenta y suave, los aromas se deben quedar impregnados en el líquido y no debe quedar turbio. El filtrado cuanto más cuidado le pongas más transparente y limpio quedará. La reducción hazla a última hora, guardarás el aroma y prevendrás el resecado, si te pasas de reducción añade agua.

Para la traca final elabora el dulce, olvídate de tartas fabricadas y natas artificiales, un simple flan con nata montada da mil vueltas a esas ridículas tartas caras que las tienes que mojar con café para que su paso por la garganta no sea una experiencia trágica. Si el menú es de importancia complícate la vida, solo así serás capaz de aprender, no temas al fracaso ya que las personas sabemos ver el esfuerzo de la gente y el día de mañana lo que ves ahora difícil mañana será un paseo.

Ofrece a tus comensales tu creación y presta atención a sus comentarios, pero es hora de disfrutar de ese menú que te ha ocupado casi tres días en crearlo.
Llegado a este punto es hora de reflexionar y analizar los errores, si crees que has fracasado, no desesperes, acuérdate de tu subconsciente cuando te dio el “ok” para arrancar y créeme que no te lo volverá a dar más porque habrá algo en tu menú que no esté bien, estás en el camino del aprendizaje.

Los grandes del sector también pasaron por este camino pero hace ya tiempo de eso, si quieres llegar lejos sigue sus huellas y ten claro que llegarás muy lejos y nunca te salgas del camino o te quedes parado pensando que has llegado a algún sitio.¿Cuántas veces has intentado reproducir una receta y el resultado no es el que esperabas en aquel menú tan importante que hiciste? o ¿has visto una receta en algún lado y no te has atrevido a hacerlo por su complejidad?
Te voy a enseñar las claves para que seas capaz de poder hacer arte y dejar deslumbrados a tus queridos comensales con tus creaciones o reproducciones y los pasos que debes seguir para hacer un menú en algún momento especial. Saca el chef que llevas dentro.

La primera clave es tener claro qué quieres cocinar e ir apuntando en una hoja el menú que vas a ofrecer. En algún momento de este proceso automáticamente te vas a dar cuenta que tus ideas están yendo por el buen camino o se están desviando de la trayectoria lógica que tiene un menú.
Es muy importante que esquematices tu menú, ya puede ser por ejemplo:
- en un primero, un segundo y un postre.
- en aperitivos, un plato principal y un postre.
- o solo aperitivos.
A esto me refiero, tener claro la secuencia del menú.
Una vez resuelto te toca elegir los platos, estos tendrán que ser acordes entre sí, si quieres hacer melodía tendrás que mantener un ritmo y elegir las notas adecuadas para emocionar al público, y claro está, saber a qué público estas brindando tu creación.
Si quieres impresionar es muy recomendable empezar tu función con algo que deslumbre. Como opinión propia elegir un estilo minimalista, bocados pequeños, limpios, estéticos y que llenen de emoción el paladar de tus comensales. Con ello conseguirás puntos a tu favor y crearás unas buenas expectativas de las siguientes secuencias del menú.
También decirte que igual de importante es empezar con algo deslumbrante que el final de este tiene que ser como un final de fiestas, con fuegos artificiales, así que saca al pastelero que llevas dentro y recrea algo rico y sabroso.
Una vez tengas esto resuelto y tu subconsciente te dé el visto bueno para arrancar habrás terminado la parte más importante, ya solo te queda seguir al pie de la letra tu canción.

Crea tu lista de ingredientes y ve a comprar, se curioso y pierde un poco de tiempo en mirar productos que desconozcas, en futuros menús te acordarás de ellos y quizás te atrevas a introducirlos a tus platos.
Una vez hallas recopilado todo el género es hora de cocinar, limpia la cocina a fondo y organízate, ten claro tus movimientos y muy importante, ten despejada la mente. Sigue estos pasos y solo fallaras por la inexperiencia que tengas.
A la hora de arrancar a cocinar deberás tener el espacio de trabajo despejado y con los utensilios en buen estado, si no es así preocúpate en que lo sea, si no estarás caminando por el camino de la despreocupación y cualquier detalle se notará en tus platos.
Controla la temperatura de tus elaboración, si no sabes muy bien cómo se hace algo, infórmate hasta que lo tengas claro, internet es la solución rápida, pero preguntando a la gente es la solución óptima ya que le vas a poder preguntar más profundamente. Para un asado controlar la temperatura es la clave del éxito ya que necesitas conocer a que temperatura debe estar el interior del producto para bordar la técnica.
Preocúpate por la destreza del corte con tu cuchillo, este debe estar perfectamente afilado (en una entrada anterior muestro el filo de mi cuchillo). Podrás jugar con cortes estéticos y limpios.
Hay algunos platos que necesitan ser manipulados con exactitud y controlar la técnica. Si quieres aprender como cocinero no descartes estas recetas por su complejidad, crece y aprende de los errores.

Borda la salsa. Es un detalle que cualquier persona sabe apreciar, esta debe ser limpia, sabrosa, untuosa. La cocción debe ser lenta y suave, los aromas se deben quedar impregnados en el líquido y no debe quedar turbio. El filtrado cuanto más cuidado le pongas más transparente y limpio quedará. La reducción hazla a última hora, guardarás el aroma y prevendrás el resecado, si te pasas de reducción añade agua.

Para la traca final elabora el dulce, olvídate de tartas fabricadas y natas artificiales, un simple flan con nata montada da mil vueltas a esas ridículas tartas caras que las tienes que mojar con café para que su paso por la garganta no sea una experiencia trágica. Si el menú es de importancia complícate la vida, solo así serás capaz de aprender, no temas al fracaso ya que las personas sabemos ver el esfuerzo de la gente y el día de mañana lo que ves ahora difícil mañana será un paseo.

Ofrece a tus comensales tu creación y presta atención a sus comentarios, pero es hora de disfrutar de ese menú que te ha ocupado casi tres días en crearlo.
Llegado a este punto es hora de reflexionar y analizar los errores, si crees que has fracasado, no desesperes, acuérdate de tu subconsciente cuando te dio el “ok” para arrancar y créeme que no te lo volverá a dar más porque habrá algo en tu menú que no esté bien, estás en el camino del aprendizaje.
Los grandes del sector también pasaron por este camino pero hace ya tiempo de eso, si quieres llegar lejos sigue sus huellas y ten claro que llegarás muy lejos y nunca te salgas del camino o te quedes parado pensando que has llegado a algún sitio.

domingo, 15 de septiembre de 2013

Adicto al polvo blanco

A quién no le ha sucedido  que al abrir una bolsa de cualquier snack comienzas a comer de forma humana, despacio, de uno en uno,  y te das cuenta que estás terminando esa bolsa “a puñado limpio” sin que la mandíbula te de abasto para moler tanta comida. He de decir que esto ocurre siempre más en hombres que en  mujeres. Si no sabes de lo que te estoy hablando acuérdate de la última película que viste en el cine con el trágico final que tuvieron tus inofensivas palomitas metidas en un cubo o de aquellas pobres que se cayeron de la boca al no entrar más y se pusieron a salvo encima de tu camiseta y que para ti fueron un regalo al no tener más en el cubo.
Bueno amigo esta pregunta se responde con dos palabras. Glutamato Monosódico.

Este adictivo aditivo, MUY usado por la industria “fritanguera” y “grasosa”, es capaz de transformar nuestra conducta alimentaria pasando de ser humano a un auténtico monstruo depredador adicto.

Esto ocurre porque las tranquilas células de nuestro cerebro, en la ingesta prolongada de esta toxina, presentan conductas anormales y aceleradas que al cabo de un corto periodo de tiempo  acaban muriendo. Esto conlleva a la excitación del cerebro y explica nuestra conducta deplorable alimentaria.

Es utilizado en la industria conservera  por su poder de salazón, ya que la sal común deja de hacer efecto a largo plazo, en cambio el aditivo dura a lo largo de la historia.

¿Entonces por qué las empresas de aperitivos elaboran sus productos con adictivos?
La cuestión es muy simple, “cuando haces pop, ya no hay stop” otra vez volvemos a hacer referencia a cómo nos introducen  estos monstruos multinacionales sus logos y sus eslóganes, en la cabeza aprovechándose de los efectos que hacen sus productos en nuestro organismo.
Estas grandes empresas aparte de incorporar mil aditivos conservantes y colorantes a sus productos añaden este saborizante para dar más potencial a sus aromas añadidos.
Es curioso cómo la simple fermentación de una levadura “inicio de la creación del glutamato monosodico” puede hacer que unos productos artificiales como vienen siendo los famosos ganchitos, bolas de queso, etc. tripliquen el número de ventas y con ello generen cifras desorbitadas de dinero en los bolsillos de los empresarios. Una muestra de ello son las cifras de productividad que indican de como en 40 años se ha multiplicado por 10 la producción de esta sustancia empezando en 1970 con 200 mil toneladas anuales a nuestros días con casi 2 millones de toneladas anuales. Recuerda que estamos hablando de una sustancia adictiva.

¿Por qué se encuentra este aditivo dentro de productos cárnicos como salchichas, chorizos, jamón de york, etc.?
Seguramente habrás escuchado alguna vez la palabra “umami”, el descubrimiento del quinto sabor sacando de la lista al picante. El umami se conoce por el sabor de lo sabroso y esta excitotoxina produce ese sabor en nuestro reproductor de sabores llamado lengua. Qué curioso que la palabra “umami” provenga del japonés significando “sabor agradable” y que justo a las personas que consumen este aditivo se les clasifique con el “síndrome del restaurante chino”. Este síndrome  se le otorgan a las personas que después de comer en estos lugares de placer, terminan con dolores de cabeza, descomposición, nauseas, visión borrosa, etc. Lo siento por los mexicanos y su picante pero creo que el shusi industrial japonés o las sopas chinas de microondas han ganado la batalla a los frijoles.

El exceso de aditivo en nuestro organismo.
Decir que el glutamato monosódico no engorda  al ser este un producto más refinado que el mismo polvo colombiano, lo que sucede que suele ir de la mano con productos como lubricantes industriales, aromas y colorantes artificiales, etc. En muchos “restaurantes” de Asia se sustituyó la sal común por este aditivo y al cabo del tiempo se terminó prohibiendo por ser excesivamente cancerígeno.

Si algún día te sientes hambriento y quieres quitarte esa sensación rápida, elige productos que contenga (E-621) en su lista de ingredientes. No me des las gracias por este consejo. 



jueves, 12 de septiembre de 2013

Veneno marino

Qué imagen tan cotidiana la de ir a una pescadería y comprar esos estupendos productos provenientes del mar, frescos, brillantes, con unos ojitos resultones (si no es así ni los mires), pero ¿sabes exactamente lo que estas comprando? Qué gran pregunta, te voy a contar unos pequeños detalles que seguro que habrás oído de refilón pero no con la suficiente fuerza como para hacerte investigar sobre el asunto.

Yo soy gran amante de estos productos, me encanta que mi proveedor de pescados me traiga las mejores piezas que posea, gracias a este amor me fui especializando en esta materia y fui investigando sobre los peces y su forma de vida.

Cuando pensamos en introducir pescado a nuestra dieta lo hacemos por su bajo nivel de grasas, por aportar omega 3 y 6, proteínas, etc. pero a su vez estás introduciendo mercurio, bacterias portadoras del cólera, fungicidas y una larga lista de productos químicos.
La mayoría de la culpa de todas estas sustancias tóxicas en los pescados provienen de las famosas granjas de ciénagas asiáticas que tratan al animal como si fuera basura, alimentándolos de formas desfavorables y sacrificándolos como si de la “Matanza de Texas” se tratase.
Pero no todo se queda en los criaderos de pescados, si nos vamos a los océanos nos encontramos un alto nivel de mercurio en los animales, esto es el resultado de la contaminación climática y según el gobierno chileno, en particular "de las termoeléctricas a carbón y fundiciones mineras".

Pacientes que han enfermado al consumir pescados contaminados con alto nivel de toxinas han sufrido de palpitaciones, cefalalgia, náusea, diarrea, sensación de ansiedad y un sin fin de síntomas que solo por el nombre asustan.

Cuando hablamos de peces tóxicos siempre nos viene a la cabeza ese pez que solo puede ser manipulado y vendido por expertos chefs que posean una licencia especial, el pez globo que posee una toxicidad tan alta que provoca la paralización lenta de los músculos de un humano sin que éste pierda en ningún momento el conocimiento hasta que llega a la muerte, pero gracias a Dios, estos peces están bien controlados y no tienen la suerte de ser alimentados artificialmente, ni vivir en aguas contaminadas.

Te voy a dar una serie de consejos para poder elegir peces con menor índice de toxicidad.


Lo primero y más importante es dejar de comprar PANGA, por muy buena pinta que tenga este pescado su alto nivel de mercurio es lo que menos alarma. Estados Unidos cuyo país es famoso por su mala alimentación y por muchas cosas más, prohibió la importación de este ejemplar a su país, esto da que pensar y España es el segundo país importador de este pescado.
Lo segundo es evitar pescados que procedan de granjas de dudosa calidad, éstos te los encontrarás siempre en la zona de congelados de tu supermercado.
Lo tercero es saber que los peces que están en la cima de la cadena alimentaria son los que más alto nivel de mercurio poseen, así que lo recomendable es comer los que están al final de esta cadena y siempre en estado salvaje.

Cuando vayas a limpiar estos productos es importante retirarles de una forma limpia todos los despojos para que no contamine la carne del animal.
Estos consejos también los tienes que aplicar a los mariscos ya que ocurre exactamente lo mismo, sus nivel de sustancias toxicas también son alarmantes y a la hora de manipularlos tienes que retirar ese pequeño intestino que poseen, lo siento si me estas odiando en este momento por decirte que ese hilo negro que tiene la gamba se lo vas a tener que quitar para no ingerir sustancias toxicas.

Te mentiría si te digo que no quiero alarmarte con este articulo pero la verdad que es mi intención hacerlo, soy consciente que ves un pescado bonito sin espinas ni piel en un supermercado y lo compras porque tu hijo, marido, padre o quien sea se lo va a comer sin problemas, o por sus aparentes cualidades saludables al no tener ni gota de grasa. Pero tenemos que empezar a luchar con este tema. Con esto me despido y espero haberte abierto un poco la curiosidad.

viernes, 6 de septiembre de 2013

McAdrian



Después de escribir esa maravillosa entrada  del payaso feliz, que nos abrió el apetito con sus digestivas hamburguesas, se me ocurrió la genial idea de crear una hamburguesa bautizándola  como la McAdrian, probablemente es el triple de sana y ya te aseguro que el triple de barata.

Para poder reproducir esta hamburguesa en tu salón de baile necesitarás:

  • Un pan de hamburguesa, el que más te guste.
  • Mahonesa.
  • Salsa barbacoa, (mi favorita para esta obra de arte).
  • 180g de carne picada de ternera, vigila que sea de ternera ya que  en muchos lados te venden caballo, el refrán de “gato por liebre” lo podemos sustituir por “caballo por ternera”
  • Dos rodajas de tomate, el corte no debe de ser grueso como acostumbramos a hacerlo.
  • Un pepinillo estilo dulce.
  • Unas rodajas finas de chalota, cebolleta o cebolla, esto va a gusto del consumidor.
  • Una loncha de queso cheddar rojo, el rojo se  obtiene de una planta llamada Annatto. Importante no usar queso de plástico, ya sabes cuál te digo.
  • Para aliñar la carne: 25g de cebolla, 10g de salsa barbacoa, sal y pimienta negra.


Empezamos abriendo el pan y tostándolo, es importante tostarlo por los dos lados para que se note el crujiente en la mordedura. A la vez vamos aliñando la carne y amasándola hasta conseguir una mezcla uniforme.  TRUCO: en este paso es importante amasar bien la carne para que cuando la vayamos a cocinar no se desmorone y guarde la forma.
Formamos el filete con la mano o con un plato plano para dejarlo bien liso y lo cocinamos en plancha.  Cuando le vayamos a dar la vuelta hay que poner la loncha de queso encima de éste. TRUCO: es importante en este punto poner una tapa encima de la sartén para crear efecto horno y el queso se funda adhiriéndose a la carne y a su vez el centro del filete se cocine bien, lo siento pero en el vídeo que muestro más abajo del proceso no sale este paso.
Una vez que tengas las elaboraciones calientes listas solo nos queda el montaje, yo recomiendo poner  la mahonesa en la tapa de abajo, encima la carne y después poner las verduras. Con ello conseguiremos una estructura sólida y terminar poniendo la barbacoa en la tapa de arriba.

Solo nos queda ponernos el babero, abrir una cerveza bien fría, bendecir la mesa y dar “me gusta” al creador de “la McAdrian

Espero que os guste y os dejo el video de su elaboración.